Recopilación de Reseñas

EL CUARTO JINETE

0. Alcorce (lector cero. La novela aún no estaba publicada)
16 Adrimedia (cuidado, spoilers inside)
28. Cultura Hache, por Javier Martos
30. Alsgarán (Somos Leyenda)

EL CUARTO JINETE: ARMAGEDÓN

EL CUARTO JINETE: DESTRUCCIÓN MASIVA

1. Doctor Motosierra
2. SpoilerZombie
3. Cinefagia80
4. Alcorce
5. Calles de tinta
6. Frikis Reconocidos

SWEET DREAMS

CON Z DE ZOMBIE

1. El errante
2. Frikarte
3. FantasyMundo

PETA Z

1. David J Skinner
2. Cultura H
3. Los archivos del Valhalla
4. El legado de Gilead

LEYENDAS URBANAS

1. El legado de Gilead
2. Cinefagia 80

ORILLA INTRANQUILA

1. Crónicas literarias
2. David J. Skinner
3. Aminha Moreninha
4. El errante
5. FantasyMundo
6. 12 libros ¿Qué leer?
7. Cruce de caminos
8. Calles de tinta
9. Después de la histeria
10. La ventana secreta

NO EXISTEN LOS MONSTRUOS

1. Alcorce
2. Lectura directa
3. Frikarte
4. Frikis Reconocidos
5. La casa de El
6. FantasyMundo
7. Cruce de caminos
8. Doctor Motosierra
9. Umbral del dolor

ANTOLOGÍA Z 7

1. Alcorce

LA HISTORIA SE ESCRIBE CON Z

1. Cientos de miles de historias
2. Fantasymundo
3. La mazmorra
4. Alcorce
5. Chica sombra
6. Athnecdotario incoherente

LAS HORAS PERDIDAS

1. Dr. Motosierra
2. Frikis Reconocidos
3. Catástrofe Video Reseña

Malditos bastardos

He vuelto a ver esta película y, tras este segundo visionado, sigo diciendo que me encanta, que me parece un peliculón y que es soberbia.
Creo que Tarantino ha ido creciendo como guionista y lo demuestra, construyendo una fábula tan enloquecida como absolutamente original, y creo que sigue siendo el mejor dialoguista del momento. Da igual que te centre la trama en matones que conversan sobre hamburguesas, en asesinas de élite que elucubran sobre Supermán y Batman, sobre ladrones de joyas que conversan sobre el significado de Like a virgin, Tarantino es brutal poniendo palabras en la boca de los actores.
Y aquí lo demuestra con creces. Sólo la primera secuencia, el primer capítulo de los cinco que componen la película, es ya de por si una pequeña joya, con ese fantástico Christoph Waltz que es capaz de explicar, de argumentar, el por qué del odio alemán a los judios, y conseguir que digas «ah, claro, si es así…».
No sabría con qué quedarme de toda la película si tuviera que escoger un sólo fragmento. Ese primer capítulo, o el que da nombre a la película, o toda la parte del sótano-bar… o toda la parte final. Sinceramente, es que me gusta entera.
Y creo, además, que todos los actores están brillantes, incluido ese Brad Pitt con más cara de estreñido que nunca. La secuencia de la llegada al cine, hablando «italiano» me hizo llorar de risa las dos veces que he visto la película. Aunque es cierto que la mayor gloria de la película se la lleva Waltz. Pero merecidamente.
En definitiva, una joya. A mi gusto.

Libros leídos 2011 (12): Los caminantes

Libros Leídos en 2011:

1) El Talismán, de Stephen King y Peter Straub
2) Oscura, de Guillermo del Toro y Chuck Hogan
3) Muy pronto seré invencible, de Austin Grossman
4) Cuernos, de Joe Hill
5) El pasaje, de Justin Cronin
6) La búsqueda del grial 1: El castillo de las sombras, de J.H. Brennan
7) Apocalipsis Z 3: La ira de los justos, de Manel Loureiro
8) Nivel 26, de Anthony E. Zuiker y Duane Swierczynski.
9) Antirresurrección, de Juan Ramón Biedma
10) La casa infernal, de Richard Matheson
11) Superviviente, de Juan García Hernández

12) Los caminantes, de Carlos Sisi

Me ha durado cuatro días.
Recuerdo que cuando salió a la venta este libro me daba pereza. No sé por qué, porque los zombies me encantan y el libro tenía buenas críticas. Era una de esas perezas sin explicación.
Pero bueno, tanta gente me decía que era cojonudo que al final me lo compré. Y vaya, porque la segunda parte la tengo metida en una de las cajas de la mudanza, que si no la empezaba hoy mismo, porque la novela de Carlos Sisi me ha parecido, sencillamente, acojonante.
Grandes personajes, narrativa ágil y directa como un buen puñetazo de boxeador, trama elaborada y lo suficientemente interesante, suficientes tópicos del género como para satisfacer el ansia de los más puristas pero no tantos como para parecer un remake de cualquier película de Romero, una recta final impresionante y, sobre todo, muchos zombies y sangre a raudales.
Pero ante todo, y creo no estar diciendo ninguna tontería, Los caminantes es una gran novela. En serio. Leedla porque no os va a defraudar.

Código fuente

Me encantan este tipo de pelis. Quiero decir, que en realidad no es nada novedosa la trama, porque algo parecido se ha visto ya en formato cómico-romántico en Atrapado en el tiempo, o en distintas formas de acción, como aquí, en Retroactive, Los cronocrímenes o Triangle. Y esto por citar las que me salen a bote pronto. A mi es que el rollito viaje en el tiempo para cambiar el pasado me gusta mucho. Por eso me flipa El efecto mariposa.
En fin, Código fuente tiene una trama que no es novedosa, pero a mi me ha encantado por detalles meramente subjetivos. Supongo que, si la analizo criticamente, lo primero a señalar es lo patético de sus efectos digitales. La explosión del tren parece que la han hecho en paint, porque vaya, es cutre hasta decir basta.
Pero si la trama logra engancharte se lo perdonas. Los actores están bien, tal vez el más flojito de ellos es Gyllenhaal, que se pasea por toda la peli con el ceño fruncido y la misma expresión (otro firme candidato al trono de «Mister Cara de Palo»), pero los demás están correctos. Nada sobresaliente en plan «denle a este señor un oscar» pero al menos mantienen el tipo.
La dirección, correctita, sin más. Yo creo que el director ha cumplido pero sin ponerle demasiado empeño a la cosa.
Eso sí, la trama peca de inocente. El misterio está poco cubierto, y desde el primer viaje adiviné por donde iban los tiros, en el sentido de en qué dirección acabaría señalado el culpable. No quiero decir más porque no pretendo desvelar nada a nadie.

The Killing

Aviso desde ya: Esta entrada puede contener spoilers.

No negaré que la serie de AMC me la he tragado religiosamente, pero tampoco asumiré, lo diga quien lo diga, que es una gran serie. AMC me tiene desconcertado. Es una cadena con la que no logro saber si algo va a gustarme o no. Es capaz de hacer maravillas como Breaking Bad, cosas interesantes pero con un regusto a bueeeeeh como The walking dead, y patatas como Rubicon. Y sí, ahora venid a llamarme blasfemo, pero no me bajaré de mi burra: Rubicon era una patata aburridísima, sosísima y lentísima.
Sobre Mad Men no hablaré porque no la he visto porque ni siquiera me atrae para empezarla.
No creo ser el más listo del mundo, aunque muchas veces mi imaginación desbordada y acostumbrada al lenguaje narativo me juega malas pasadas adelantándose a la trama y haciéndome sospechar sobre las identidades de los malos malérrimos. Desde los tiempos en que veía Colombo religiosamente hasta aquella temporada y media que seguí CSI antes de abandonarla por pesadez, soy capaz de adivinar quién va a ser el asesino antes de que lo señalen. Con una tasa de aciertos cercana al pleno.
Desde el minuto uno supe que Richmond estaba involucrado. No creo que fuera el asesino, y nunca lo creí, pero sí estaba seguro de que el último capítulo iba a estar centrado en él. Sorpresa, no me equivoqué. Y sí, es cierto que cualquier serie de misterio, y más las que se centran en «¿Quién mató a X?», se van a dedicar a marearte y mandarte en direcciones incorrectas durante la mayor parte de la trama antes de señalar en la dirección correcta. Es obvio. Más que nada, porque si no la trama les daría para un único capítulo y la serie se llamaría Bones, CSI, Navy o cualquier otra. Es por eso que, al final, después de acabar la temporada, uno no puede dejar de sentir que en realidad lo que ha visto es mucho relleno y poca chicha. Porque todos sabíamos que el profe era inocente, ¿verdad?
Y eso sin entrar a hablar de la estructura, consistente en «resolución del clifhunger-relleno-clifhunger final» que tenían todos los capítulos. En todos ellos pasaba algo impactante al final que resolvían al empezar el siguiente capítulo demostrando que en realidad ese algo impactante era un bluf en realidad, seguían con mucho relleno y acababan con un nuevo descubrimiento impactante.
Obviamente, cuanto más avanzaba la serie menos impactantes resultaban los descubrimientos impactantes.
El colmo del relleno llegó con el capítulo once. Que sí, que nos muestra la relación entre los dos protagonistas, pero nada más, ese capítulo es un «vamos a aparcar la investigación para contaros otra cosa que no guarda ninguna relación». Se hace más indignante por el hecho de estar a las puertas del final de temporada.
Y luego llega el final de temporada, dejando esa puerta tan abierta y sin resolver realmente el crimen. Sinceramente, no es lo que más me ha disgustado de la serie. De hecho, no me ha disgustado nada porque como final me ha encantado. Me joroban más otras muchas cosas de la serie. Como los personajes. Excepto Linden, cuya cara de piedra y expresión imperturbable me encantan, el resto… bah. Holden no es más que una copia mala del Jesse Pinkman de Breaking bad (hasta habla parecido y le gusta la meta…) y Michelle Forbes (cuya interpretación alabaré hasta la saciedad por parecerme de lejos lo mejor de la serie) tiene un personaje con el que no dejas de sufrir al principio de temporada y que a medida que avanza le coges tirria con su sempiterno dolor incrustrado en el rostro y su actitud hacia su marido (otro actorazo) y el resto del mundo. Por no hablar del hijo de Linden, nominado a personaje asesinable del año, y cualquier personaje relacionado con la aburridísima trama electoral, Richmond por delante con su cara de «que triste estoy» y sus secuaces aburridos.
En definitiva, me quedo con la sensación de indiferencia. Si no hubieran renovado, no se me caería el mundo. Como han renovado, imagino que veré la segunda temporada. A menos que me canse por el camino, cosa que tampoco descarto.
Eso sí, manda cojones tener que leer declaraciones de la creadora diciendo que «The killing ha roto moldes para las series de misterio» cuando en realidad su serie no es más que un capítulo de cualquiera de las otras series mencionadas, pero estirado para que dure más, y cuando The Killing muestra escasa originalidad tanto en formato como en forma. ¿Lleva bien el caso? Para gustos colores. ¿Es interesante de seguir? Sí, aunque no siempre. Creo que la señora creadora de The Killing, al decir lo de que rompía moldes, debía referirse al hecho de que nunca en la historia una serie había tenido un departamento de vestuario tan aburrido y feo. ¿Por qué demonios Linden lleva el mismo jersey durante cuatro o cinco capítulos seguidos si se supone que son días distintos?

Paul

¿Una película sobre dos frikis que se encuentran con un alienígena recién fugado del Area 51 y deben ayudarle a regresar a su planeta? Es imposible que una película así sea mala. Y si encima añades un caracter completamente maleducado y altivo al extraterrestre y unas cuantas situaciones divertidas e imprevistas, y culminas el pastel con unos secundarios tan extravagantes como hilarantes (lo mejor, de lejos, los dos agentes del FBI que son más raros que un perro verde) pues tienes una película lo suficientemente entretenida como para pasar un buen rato y soltar alguna carcajada.
Al menos yo me lo pasé bien viéndola.

Libros leídos 2011 (6): El castillo de las sombras

Libros Leídos en 2011:

1) El Talismán, de Stephen King y Peter Straub
2) Oscura, de Guillermo del Toro y Chuck Hogan
3) Muy pronto seré invencible, de Austin Grossman
4) Cuernos, de Joe Hill
5) El pasaje, de Justin Cronin
6) La búsqueda del grial 1: El castillo de las sombras, de J.H. Brennan

No sé por qué me ha dado por ahi… pero llevaba unos días dándole vueltas a aquellos maravillosos libro-juegos que leía cuando era niño, acompañado de un folio, un bolígrafo y un par de dados (que solía sacar del Risk o del Hero Quest, ya que lo cuento todo). Tenía tres o cuatro, de los cuales La ciudadela del caos y Laberinto mortal eran mis favoritos y los jugué en múltiples ocasiones.
Nunca había jugado a la serie Búsqueda del grial, pero hoy me hice con el primero y me puse en modo revival de la infancia. No sé si es que aquellos de LuchaFicción que yo tenía (tapa color rojo) eran más dificiles, pero lo cierto es que la búsqueda del grial no me ha durado nada, sólo he estado en verdadero peligro de muerte en una ocasión y he completado la aventura satisfactoriamente a la primera… aunque confieso que durante quince o veinte minutos me he perdido y he estado dando vueltas por las cavernas del maldito castillo…
En fin, que me lo he pasado genial. Volveré ahora a mis lecturas de adulto.

Carne de neón

Yo no sé qué pasa en este país pero parece que para atraer a la gente al cine creen que sólo hace falta decir tacos, ser soeces y mostrar tetas y culos. Así que ni cortos ni perezosos, arman una tipo Snatch (aunque ya quisieran) y centran la trama en el montaje y explotación de un puticlub.
Y vale, empieza bien y tiene algún punto bastante gracioso, pero se va desinflando a medida que avanzan los minutos, cada vez de forma más acelerada. Obviamente, ayuda bastante poco el pobre Mario Casas, que aunque de pobre economicamente ya deba tener poco, como actor alguien debería decirle algo. O no, porque está claro que aquí les importa más poner al tipo de moda a ver si así atrae a la juventud a la sala, en lugar de buscar un actor que pueda estar a la altura. Coño, es que encima tiene que narrar cosas en off, y la verdad es que apesta un poco. De hecho, cuando habla Vicente Romero en off se nota la diferencia de calidad artística. Es como un precipicio entre ambos.
En fin, que Ángela Molina está muy bien, de lejos lo mejor de la película, aunque Vicente Romero le sigue de cerca. El resto, bastante olvidable, incluida Macarena Gómez, que no porque lo haga mal, sino porque su papel resulta harto desagradable.

Mañana, cuando la guerra empiece

Un grupo de jóvenes australianos se marchan a pasar el fin de semana de acampada. Cuando regresan a sus casas, se encuentran con que Australia, que es donde tiene lugar la acción, ha sido invadida por un ejército asiático (juraría que en ningún momento dicen nacionalidad) y el país está en guerra… y depende de ellos.
Como punto de partida me parece cojonudo, la verdad.
Y vaya por delante que me lo he pasado bien viendo esta película. Me recordaba a aquellas pelis que veía de pequeño donde un grupo de chavales tenía que hacer frente a los malos de turno, como Amanecer rojo o Soldados de juguete (graaaaaande). Y sí, me molaban esas pelis, ¿qué pasa?
Mañana, cuando la guerra empiece, al parecer se basa en una saga de siete libros de un escritor australiano. En España por lo visto se publicó el primero hace como diez años y de lo poco que vendieron despareció del mercado. Lo han vuelto a editar, pero me da que han vendido otros tres ejemplares y pista. Desde luego, la peli ha pasado absolutamente desapercibida.
Y es que, hombre, no es gran cosa. Es cierto que tienes que hacer mucho esfuerzo mental para dejar de lado cosas que de lo normal te sacarían completamente de la historia, como por ejemplo, que estos siete chavales puedan convertirse en una fuerza rebelde, mitad guerrilla, mitad operaciones especiales, que haga frente a un ejercito invasor en plan Doce del Patíbulo. Y evidentemente, uno tiene que hacer mucho esfuerzo mental para impedir que las conversaciones sobre «jo, tía, y estás enamorada» «No sé lo que siento, tía, las relaciones sentimentales son muy complicadas» mientras se preparan para efectuar el gran golpe militar, no te hagan vomitar arcoiris…
Pero bueno, lo cierto es que, si uno simplemente se deja llevar y pasa de las bobadas, la peli tiene sus cosas entretenidas. Eso sí, ahora me da miedo volver a ver Soldados de juguete, a la que tengo en gran estima, no vaya a ser que resulte tan boba en el fondo…

Sucker Punch

Antes de nada, debo contar el por qué llevo tanto sin actualizar. He tenido tres semanas de rodaje intenso y fuera de Madrid, lo que me ha dejado con tiempo escaso para todo. En uno de esos ratos de ocio que pude disfrutar, el fin de semana arrastré a Cris en contra de su voluntad a ver la nueva película de Zack Snyder, al cual, después de Amanecer de los muertos y 300, y a pesar del bache que supuso para mi Watchmen, aún tenía en mi pedestal de «directores de cine a los que ir a ver sin rechistar».
Sucker Punch, pues ese es el título de la película, podría traducirse como «Golpe Bajo». Y oye, creo que el título le viene al pelo, porque realmente, la película es un tremendo golpe bajo.
Aunque creo que el término que mejor la define es el siguiente: PATOCHADA.
Hacía tiempo que quería utilizar esa palabra.
Zack Snyder no sólo se ha caído de mi altar de «directores de cine a los que ir a ver sin rechistar», sino que además ha entrado de lleno en el de «antiguos genios que no volveré a ver a menos que algún amigo cercano me lo recomiende encarecidamente».
En serio… Menuda patata de película. Y sí, no le niego a nadie que el amigo Snyder es un genio visual y es capaz de componer imágenes asombrosas, aunque también es cierto que me llaman menos la atención sus increíbles idas de olla digitales que, por ejemplo, el maldito plano secuencia de los tres espejos, que aún sigo preguntándome cómo demonios pudo hacerlo.
La peli es mala. No por lo visual, sí por lo auditivo (vaya lista de canciones, seeeeñor) pero sobre todo, sobre todísimo, por el patético guión que mueve la película. Y no me refiero a los cuatro cortometrajes o mini historias, que molan, sino a la trama central inventada de las chicas cabareteras, que es para mear y no echar gota. Terrorífica. No dejé de preguntarme, ni por un segundo, que grande podría haber sido si en vez de esa imbecilidad hubiera dejado la historia del manicomio.
Y los diálogos… dignos de un pelotón de fusilamiento.
Atroz es otra palabra que describe bien esta película.