No existen los monstruos en La casa de El

Leer en una reseña «Sin duda alguna es un escritor entre escritores, que maravilla con su prosa directa y que además…» es algo que me deja sin palabras. En general toda la reseña me causa ese efecto. Es evidente que me alegra ver que mi novela ha gustado tanto a alguien como para considerarla imprescindible. Me enorgullece.

La reseña es de La casa de El, podéis leerla en su web pinchando en el enlace, y también os la copio a continuación:

No existen los monstruos es una apasionante aventura a modo de thriller y sorprendentemente basada en hechos reales que nos atrapan para contarnos la historia detrás de unos misteriosos asesinatos y la búsqueda y obsesión de nuestro protagonista, Sean Cassidy, en atrapar a un asesino en serie que puede tener conexión con su pasado atroz.

Así que tenemos dos frentes, por una parte el intento de un atentado contra uno de los hombres clave del tercer Reich, llevada a cabo por unos ciudadanos rebeldes de origen checoslovaco, que quieren liberar a su país, del régimen nazi. Y por otra, unos misteriosos asesinatos que comienzan a ocurrir allí y que atraen la atención de Sean, un joven americano que se embarca en esta misión con el objetivo de perseguir y descubrir al culpable.

La perpetración del golpe, así como el descubrimiento de la identidad de nuestro asesino en serie, me han resultado un soplo de aire fresco en el género de la literatura de terror. No existen los montruos es una aventura “basada en hechos reales” totalmente sorprendente e intrépida, cuyo final es un broche digno y lógico (algo que provoca que esos personajes cobren la realidad que se merecen) dentro de la brillante mente del escritor, que juega con los miedos para cambiar la historia, y que sabe muy bien lo que se hace.

Sin duda alguna es un escritor entre escritores, que maravilla con su prosa directa y que además nos regala algunas referencias cinematográficas y literarias, que encajan a la perfección en la trama. Además, si no las reconocéis podéis estar tranquilos, ya que el autor nos regala al final del libro un pequeño extra contándonos cómo se gestó No existen los monstruos aparte de los pertinentes agradecimientos.

Pero lo mas reseñable de esta obra es esa conexión del miedo a los monstruos que nos persigue desde niños y nos aterra, a veces con hechos atroces que marcan nuestra vida y otras con simples temores, a los que cuando buscamos una explicación, pueden resultar reveladoras y cambiar nuestra vida, como le ocurre a nuestro protagonista, o simplemente provocarnos unas buenas risas. No existen los monstruos persigue esta primera idea, porque a veces aun siendo mayores seguimos teniendo miedos y es al enfrentarnos a ellos, cuando nos damos cuenta de lo terrible que resultaría que realmente existieran. En esta historia los monstruos son dos, uno que lo reconoce y vive con ello y otro, que los justifica como un avance de la sociedad. Ambos monstruos no resultan ser unos personajes inofensivos escondidos en armarios, sino verdaderos asesinos que desgarran la vida con el propósito de obtener algún tipo de satisfacción, ya sea personal o “por el bien de su sociedad” como rezaba el régimen nazi.

No existen los monstruos es ese soplo de aire fresco al género del thriller de terror que no puede faltar en tu estantería. Una historia muy bien argumentada que sorprende en su desarrollo y maravilla con su final. Una obra imprescindible.

 

Puntuación: ★★★★½