Psyklon-Z, que ya publicó en su momento una reseña de El cuarto jinete, e incluso realizó una espectacular ilustración sobre mi novela, se ha lanzado ahora a la lectura de Postales desde el fin del mundo. Podéis encontrar la reseña en su web, que siempre es mucho más interesante, pero también os la copio a continuación:
2012 ha sido un año marcado por la amenaza de un fin del mundo predicho pero que nunca llegó. Es logico que el panorama literario se haya visto salpicado por dicho evento, ansioso por contar a modo de novelas o antologias distintas man eras en las que el planeta se viera amenazado por un tragico fin.
Pero pocas de estas obras cuentan no ya como acabará el mundo… sino lo que sucede después.
La antologia POSTALES DESDE EL FIN DEL MUNDO, coordinada por el inagotable Victor Blazquez (Para ya macho, que te va a dar un patatus) es, aparte de un torrente de talento y diversidad, un ejemplo sobresaliente al enseñar una increible variedad de visiones de un mundo postapocaliptico. Y es que, como se dice en la misma antologia “no hay dos finales iguales”.
Es muy difícil dar la opinión de una antologia sin pararse en cada uno de los relatos en los que se componen, y mas en esta donde ninguno de ellos es, por decirlo de alguna manera “de relleno”, asi que nombraré los que mas me han impactado para no alargar demasiado el cotarro.
La obra comienza de manera inmejorable, a manos de Alejandro Castroguer, centrando el Apocalipsis en la eterna lucha entre los defensores de la cultura escrita y los que buscan su destrucción por el bien de la humanidad en “Bradbury 451”.
Curioso es cuanto menos la manera en que “DejaVu” de Arlette Geneve relata el fin del mundo, desglosado en recortes de periodicos donde, lo que al principio pueden ser conflictos aislados terminara originando el comienzo de la tercera guerra mundial, lo que lo convierte en el relato mas realista de la colección.
“Ya todo eran tumbas” de Miguel Aguerralde es uno de ms relatos favoritos dentro de la antologia, en la que una madre llegará a extremos indescriptibles para recuperar a su hijo en un yermo arrasado donde un vaso de agua tiene mas valor que la vida humana.
De “El fin” de Luis Manuel Ruiz no puedo hablar mucho por el mismo motivo por el que quedé encantado con el relato y es que posee uno de los mejores giros argumentales que he leido en mucho tiempo.
“El secreto del campanario” de AC Ojeda es una triste metafora del poder de la influencia y la superstición en la sociedad aislada. Emotiva y violenta a partes iguales.
“El juicio de Icaro” de Ruben Pozo Verdugo, otro de mis favoritos, muestra de manera magistral que el fin del mundo como lo conocemos puede ser solo el comienzo de algo tan importante como la esperanza, y las consecuencias que puede traer el querer luchar por ella.
Sin duda, mi relato favorito, “Manada de lobos” de Angel Villan es una montaña rusa empapada en adrenalina, donde se narra la lucha de la humanidad contra unos seres surgidos a raiz de una plaga que ha desolado el planeta. Ya le comenté al autor que durante su lectura tuve que esforzarme en tragar unas cuantas veces, porque sentía que se me salía el corazon por la boca. Personalmente creo que la historia y muchos de sus personajes podrían dar mucho mas que hablar en forma de novela completa. Ahí lo dejo.
“Noche de graduación” de Victor Blazquez es la prueba de que este genio no solo domina el genero de la acción y el terror, sino que si se lo propone es capaz de arrancarnos el llanto en uno de los relatos mas tristes de la colección.
Como curiosidad, tampoco ha faltado la colaboración a nivel internacional, siendo Adam Nevill con su “Manos de muñeca” quien ha aportado su granito de arena con un relato de lo mas macabro y con tintes surrealistas.
En definitiva, una de las mejores antologias con las que puedes encontrarte, lleno de talentos (Repito, todas y cada una de las historias son magnificas aunque no las haya mencionado) y encima a un precio de risa. AH! Y cada historia viene acompañada de su genial ilustración.
LO MEJOR: Todas y cada una de las historias, no sobra ni una. Totalmente distintas entre si y con una reflexión a tener en cuenta en cada una.
LO PEOR: Quizas la unica pega que he encontrado a nivel personal es el formato, mas grande de lo normal y sin mis benditas solapas.