Reseña de Antología Z 7

En Octubre se publicó la antologíaZ 7, coordinada por Joe Álamo y con presencia de varios autores entre los que me encuentro. Lo que hace peculiar a esta antología es que no es una simple recopilación de relatos sin más. En este caso, Joe hizo que cada uno de nosotros eligiéramos un género literario y elaboráramos nuestro relato ciñéndonos a eso.

Bien, yo escogí el género periodístico (e hice un relato que tiene guiños con Battle Royale, el relato que escribí para Peta Z), pero dentro de la antología hay relatos western, negro, erótico, ciencia ficción… en fin, un variadito de lo más interesante.

El errante ha escrito esta reseña:

Empiezo el año terminando una antología del género Z publicada por Dolmen. Me gusta leer relatos ya que, en muy pocas páginas, puede uno leer muy buenas historias, son cómodos y permiten ver el potencial de muchos escritores.

En este caso con nombres como Jasso, Castroguer, Garduño, Blázquez o Alamo no podía dejar pasar esta antología. Cada uno de los autores ha elegido un género diferente: steampunk, negro, western, periodísticos, terror, etc para ambientar cada uno de sus relatos.

El resultado, en general, es bastante bueno en todos los casos. Destacando dos relatos por encima del resto: Somos lo que comemos: Instrucciones para cocinar un zombi, un divertidísimo relato, cargado de humor negro, de Guillem López y Jodido Lunes, de Juande Garduño, un título que le va a la perfección a un relato impregnado de mala baba que a más de uno provocará también una sonrisa.

Destacaría tambén relatos como La carrera, La bella durmiente, Lucas, Terror Z o Camarero caramelo, aunque, como digo, todos están a un buen nivel.

En fin, una recopilación más de relatos del género Z que no defraudará a los que nos gusta este género.

RELATOS

Camarero caramelo – Alejandro Castroguer
El disparo final – AC Ojeda
El gran Martín Kaps – Raúl Lepe
Somos lo que comemos: Instrucciones para cocinar un zombi – Guillem López
Jodido Lunes – Juande Garduño
La bella durmiente – Ivan Mourin
La carrera – Víctor Blázquez
Lucas – Víctor Mateo
No siempre brilla el sol en el Caribe – Juan Ángel Laguna Edroso
Terror Z – David Jasso
Timmy Lonegan – Claudio Cerdán
Cazador de Freaks – J.E. Alamo
Zelos – Alfonso Zamora LLorente

No existen los monstruos

Ha llegado el momento de anunciar mi nueva novela, que verá la luz el 22 de noviembre (en principio y si todo va bien). Es una novela a la que le tengo mucho cariño porque ha rondado por mi cabeza durante mucho tiempo y porque me ha supuesto un trabajo de documentación y estudio importantes.

Con todos vosotros, No existen los monstruos:

Checoslovaquia, 1942.

Los Aliados mueven sus fichas hasta Praga con la intención de planificar y ejecutar el mayor atentado jamás concebido contra los nazis. El destino de Europa, y seguramente el de todo el mundo, recae sobre la espalda de los siete hombres enviados a cumplir esa misión. Pero con ellos viaja un octavo hombre, un americano misterioso del que ninguno de ellos sabe nada; ni quién es, ni la razón por la que está allí.

Mientras tanto, una serie de crímenes horribles se extienden por Praga, poniendo en jaque a toda la población…

Con esa sinopsis doy un paso en una dirección contraria al mundo Z de El cuarto jinete y me meto de lleno en un thriller histórico cargado de acción, heroísmo, amor y… el resto es mejor que lo descubráis vosotros. La novela sale de la mano de Dolmen, en su línea Stoker. Y la portada, magnífica, es de Daniel Expósito.

Os dejo el enlace a la primera entrevista que concedo al respecto de esta novela, en FantasyMundo.

Entrevista en Hello Friki

Con motivo de la salida a la venta de El cuarto jinete: Armagedón, en HelloFriki han tenido a bien hacerme una entrevista extensa pero muy interesante. Este es el enlace a la página de Hello Friki, y también os copio a continuación todo lo que hablamos:

Con motivo del lanzamiento de la novela El Cuarto Jinete: Armagedón de Víctor Blázquez, hemos tenido la ocasión de charlar con su autor y concedernos esta distendida entrevista en la que aborda no solo los detalles referentes a la novela, sino tambien el dulce momento que atraviesa la literatura patria de género, sus próximos trabajos o los referentes en los que se ha fijado desde que era niño.

Pregunta: La novela está plagada de referencias a obras de terror muy conocidas, y otras no tanto, y a autores como Stephen King o Richard Matheson. A su vez, trabajas en el mundo de la televisión y el cine como segundo de dirección. ¿Cuáles fueron en tus comienzos tus primeras referencias, el cine o la literatura?

Respuesta: La primera referencia, la más importante, fue literaria. En La Casa Negra, una novela escrita a cuatro manos entre Stephen King y Peter Straub, había un capítulo en el que el narrador le hablaba directamente al lector. Posteriormente Stephen King ha utilizado ese recurso en otras de sus novelas, aunque siempre en pequeños capítulos. Me resultó estimulante pensar en escribir toda una novela llevando ese estilo por bandera.

P: Ya que has sacado el tema del narrador  ¿Por qué ese narrador y no uno en primera persona, o el omnisciente en tercera al que tan acostumbrados estamos?

R: Porque cuando escribo me gusta retarme, contar historias que atrapen y te mantengan pegado al sillón, sin importarme si su estructura puede ser más o menos clásica, pero también me contarlas de una forma distinta, peculiar, al menos siempre que sea posible. También tengo novelas y relatos escritos con estilos clásicos, primera o tercera persona, pero, como digo, me resultaba estimulante afrontar el reto de escribir la novela de esta manera.

P: Volviendo al tema de las referencias, al comienzo de la narración hay un personaje llamado Neville en clara referencia al Robert Neville del clásico Soy Leyenda de Richard Matheson. Como ésta hay muchísimas referencias directas, y otras más sutiles. ¿Cuál es tu objetivo con dichas referencias como autor?

R: El homenaje. Me gusta, incluyendo referencias en todos sitios, hacerle un guiño a todas las novelas, películas, series o eventos que me han hecho soñar en algún momento de mi vida. O que siguen haciéndolo.

P: ¿Cuales son para ti esos títulos de novelas, series o películas que más te han influenciado a día de hoy y que has reflejado en tus trabajos?

R: Esa sería una lista muy larga y no terminaríamos nunca. Comenzaría con la primera película que hizo despegar mi imaginación, El vuelo de los dragones, una película de dibujos animados que según las historias vi unas doscientas setenta y nueve veces cuando era niño y que aún atesoro como si fueran lingotes de oro. Pero como digo, son muchas las novelas, las películas, las series y las cosas que han estimulado mi mente a lo largo de mis treinta y un años. Y de todas ellas acabo absorbiendo lo que me fascina e incluyéndolo en los engranajes de lo que mi propia imaginación fabrica. La lista de homenajes que hay en El cuarto jinete es muy larga. Y cuando digo MUY es MUY. Muchos son claros, otros no tanto, y los hay que están muy bien disimulados. Pero como sé que quieres títulos, te diré los dos primeros que me vienen a la mente, sin contar el Soy Leyenda que ya has mencionado tú: La huida (Allan Folsom), La cúpula (Stephen King) o cualquiera de sus novelas corales.

P: Comencemos a abordar parte de la trama de la novela. ¿Por qué decidiste poner el nombre de El cuarto Jinete al virus causante de toda la inección de la novela?

R: Curiosamente, hace años escribí una novela en la que un virus hacía enloquecer a parte la población mundial, despertando instintos psicópatas en la gente. No tenía nada que ver con esta novela, pero la titulé El cuarto jinete. O sea que podría decir que me he plagiado el título. El por qué: me gusta la referencia bíblica que implica, el mentar a la muerte sin realmente hacerlo.

P: Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente que decía: «Ven»

Estas son las palabras que aparecen en El Apocalipsis de San Juan en referencia al Cuarto Jinete del Apocalipsis, que por cierto, de los cuatro es el único que tiene nombre, Muerte. Las últimas teorias de aquellos que ven en estos días de crisis y de guerras un reflejo de dicho Apocalipsis anunciado, afirman que El Cuarto Jinete probablemente fuese un virus mortal que asolaría la superficie de la Tierra. ¿Casualidad?

R: (Risas) Y supongo que en los setenta las teorías decían que sería una guerra nuclear. Cada época tiene su apocalipsis dependiendo de los factores. Ahora están de moda los zombis, las investigaciones científicas están a la orden del día y una pandemia es capaz de poner en jaque al mundo (véase, la gripe aviar). La Peste Negra ya amenazó hace unos siglos con mandarnos a todos al otro barrio. ¿Qué será lo siguiente?

P: Todo el argumento de la novela está centrado en Castle Hill. ¿Por qué no en Zaragoza, Barcelona o Madrid, es decir, en suelo patrio?

R: Mítica pregunta esta. La literatura, el cine y las series que he consumido desde que era pequeño, en su gran mayoría, provienen de Estados Unidos. Me hacía sentirme más cómodo ambientarla allí, la verdad.

P: ¿Ha habido algún personaje que te haya dado problemas a la hora de crearlo?

R: Lo cierto es que no. Suelo tomar como base perfiles psicológicos que me atraigan a la hora de crear un personaje, no necesariamente que me gusten, sino que me atraigan por algún motivo, que me hagan pensar que de ahí puedo sacar algo interesante. Es entonces cuando dejo que el personaje madure en mi mente y si al final lo que surge me gusta, sigo adelante. Pero suelen tener su propia vida, eso también te lo digo.

P: Comencemos a hablar de Armagedón, ahora que su lanzamiento está a la vuelta de la esquina. ¿Por qué fuiste a Los Ángeles y no a cualquier otra ciudad como Nueva York, Miami, Boston o Las Vegas?

R: Un tipo como yo, que realiza miles de homenajes a la literatura, a las series y al cine, tenía que irse a Hollywood, ¿no? Pero vamos, la razón principal es que siempre me imaginé Castle Hill cerca de Los Ángeles. Por ninguna razón concreta, pero en mi mente era así.

P: Zombies rápidos, zombies lentos… ¿Por qué los primeros?

R: Me interesaba hacer una novela frenética, que mantuviera al lector pegado a la silla y con los nervios en tensión. Los zombies rápidos ayudan bastante en ese sentido, tienen ese componente adrenalínico que aporta desesperanza a los protagonistas. Es muy difícil huir si la muerte corre más que tú, ¿No crees?

P: Sin duda llevas toda la razón. ¿Qué aportan los zombies a la literatura que no puede ofrecer cualquier otra amenaza clásica, llámense vampiros, extraterrestres o licántropos, por poner un ejemplo?

R: Se podría hacer un gráfico de cosas que cada ser aporta, en las que coinciden y en las que difieren. El zombie habla del Apocalipsis porque por lo general supone una pandemia a nivel global, eso lo diferencia de licantropos y vampiros, pero lo iguala a los extraterrestres.
Por otro lado, aporta ese nivel humano y terrorífico de convertir a nuestros seres queridos en abominables monstruos asesinos.

P: ¿Qué encontraremos en las calles de L.A. que no tuvimos en las de Castle Hill?

R: Más gente… y por tanto más víctimas Y sobre todo, el ambiente de ciudad, que a mi gusto empeora las posibilidades de detener una pandemia de las características de El cuarto jinete.

P: ¿Se mantiene el ritmo frenético de narración, o en esta nueva entrega bajarás la velocidad respecto a la primera?

P: Se mantiene, e incluso se aumenta. Piensa que en el primer libro era necesario una presentación, para que el lector conociera a los personajes. El cuarto jinete: Armagedón me permite empezar con el acelerador pisado hasta el fondo porque los personajes son ya viejos conocidos del lector. Os lo aseguro: esta vez arranco el frenesí desde el principio.

P: ¿Te costó mucho sentarte a escribir esta segunda parte o tenías desde un principio la idea muy clara de lo que querías?

R: Curiosamente, y lo he dicho en más de una ocasión, cuando escribí el primer libro lo hice pensando en hacer algo cerrado, con un final que invitara a pensar que la vida sigue, y que podía seguir mal, pero cerrado. Es la historia de Castle Hill y sanseacabó. Pero al poner aquel punto y final… el cuerpo me pedía más. Quería seguir adelante y ver qué le iba a pasar a los personajes. Les había tomado cariño, u odio, y quería saber qué sería de ellos. Así que empecé con la segunda parte. El camino a seguir me lo marcó la propia historia casi en su mayoría. Hubo apenas un par de puntos prefijados, como si fueran metas volantes.

P: Sé que eres Vicepresidente de una Asociación literaria llamada Esmater. ¿Qué puedes contarnos sobre ella?

P: Esmater es una plataforma hecha por y para amantes del terror, aunque la mano está abierta a lo que se viene a considerar género: la ciencia ficción, la fantasía, el thriller… Intentamos mover proyectos que contengan una porción de nuestro amor por ese género, como el evento que tenemos el 25 de mayo en la Fnac de Castellana o las dos antologías de relatos que han nacido desde la asociación (una de ellas editada por Tyrannosaurus Books y la segunda que se publicará en breve).

P: ¿Cómo ves el género de terror en general dentro de nuestras fronteras?

R: Lo veo muy vivo y con fuerza. Hay nombres con mucha potencia en sus plumas y capaces de elevar el género a lo más alto si contáramos con mayor apoyo editorial y del público. Y cada vez hay mayor aceptación por el producto patrio, creo que estamos aquí para quedarnos, pero… ¿Con nombres como Carlos Sisí, Manel Loureiro, Juande Garduño, Alejandro Castroguer, Manuel Martín, Alfonso Zamora, Miguel Aguerralde, Javier Cosnava, Daniel P. Espinosa, Ignacio Cid, Javier Martos… ¿A alguien le extraña de verdad que el género español esté en boga?

P: Recomiéndanos tres novelas para los lectores que aun no se hayan involucrado en la literatura zombie.

Aunque por lo general una de ellas sería Guerra Mundial Z, de Max Brooks, hoy me ha dado por el producto nacional: Noche de difuntos del 36, de Manuel Martín. Los caminantes, de Carlos Sisí. Y la tercera, a elegir, entre De Madrid al zielo, de Alfonso Zamora, si te gustan las historias cercanas, o El manantial, de Alejandro Castroguer, si prefieres las emociones fuertes (muy fuertes).

P: ¿Ves futuro en este género a largo plazo?

R: Lo he respondido antes: creo que el género tiene ahora mismo nombres muy potentes y que pueden llegar a marcar un antes y un después en la literatura de género española.

P: Y ahora, sabiendo que la aceptación de la primera novela ha sido muy alta, y que la segunda es posible que la supere. ¿Qué nos tiene Víctor Blázquez preparado en el futuro más inmediato?

R: El futuro más inmediato es un thriller con tintes de acción y ciencia ficción que publicará Tyrannosaurus Books, titulado Orilla Intranquila. Después, solo el tiempo lo sabe, depende de un par de cosas que hay en movimiento ahora mismo.

P: ¿Puedes adelantar algo de esta nueva novela?

R: Es tal vez demasiado pronto para adelantar nada sobre Orilla intranquila. Te diré, eso sí, que es la historia de un héroe… pero como sabe aquel que me conoce, no me gustan los personajes blancos o negros, me gustan los matices grises, las aristas, las dudas que hacen reales a la gente…

P: Y por último ¿Qué le dirías a un autor novel que ha comenzado a escribir?

R: Paciencia. Ese es el mejor consejo que puedo darle a cualquiera: En este mundo es necesaria mucha paciencia para releer tu escrito y ser capaz de descubrir lo que funciona y lo que no, para estudiar a quién enviarlo y cómo hacer la propuesta, para esperar a que lo lean y lo decidan, para esperar la respuesta de los lectores…

Libros leídos 2013 (1): Tom Z Stone

LIBROS LEÍDOS 2013

1) Tom Z Stone, de Joe Álamo

En realidad estaba destinado a ser el último libro del 2012, pero una sobrecarga en mis tareas durante los últimos días del año (básicamente cuidar de los dos enanos a tiempo completo en épocas de no-cole, preparar la presentación de Postales desde el fin del mundo y una gastroenteritis que me tuvo K.O durante todo un día) lo han convertido en el primer libro del 2013.

Tom Z Stone es una novela incluída dentro de la línea Z de Dolmen y es probablemente (no he leído todos los libros de la línea), el más peculiar. Aquí los muertos no devoran seres vivos a lo loco (aunque los hay que sí pero es algo que sabemos de segunda mano y nunca lo visualizamos tal cual) y son en realidad «reanimados» capaces de hacer vida normal, casi, con la particularidad de saber que esa segunda oportunidad en el mundo no durará más de cuatro años antes de convertirse en un terminal y perder el control de sus actos.

Entonces tenemos al protagonista, Tom Stone, un reanimado que trabaja como detective privado, con unos gustos musicales maravillosos y un sentido del humor que me ha arrancado unas cuantas carcajadas.

Tras una presentación que sirve para emarcar todo esto que yo he contado pero mucho mejor explicado, la novela entra al grano directamente con la llegada de un caso al despacho en forma de cuerpo femenino escultural. A partir de ahí empieza a crearse una trama de novela negra con reminiscencias clásicas en el que resulta muy fácil imaginar todo en blanco y negro y con un aire setentero inundándolo todo.

No voy a contar nada de la trama. La novela vale la pena, está bien escrita y hace pasar un buen rato gracias al humor del protagonista (a destacar la relación que mantiene con su secretaria, uno de los mejores personajes del libro) y la trama negra está más que bien llevada. Eso sí, no te acerques a Tom Z esperando encontrar acción zombie a raudales porque entonces este no es tu libro.

No todo el monte es orgasmo, que dicen los chiquillos (o decían en mis tiempos), y también hay algo que no me ha gustado. El libro mantiene dos líneas temporales durante toda la novela. Por un lado está el caso que transcurre en el presente, y por otro lado están las historias que desgranan lo acontecido tras el llamado día FR, el día en que los muertos salieron de su letargo. No es que estén mal, ojo, y hay varios de esos incisos que me parecieron muy ocurrentes o interesantes (destaco dos de ellos, y en especial el del tipo que vuelve a casa y se encuentra a su mujer «bajo el ataque de un reanimado» en la cama), pero hubo un momento en que me jodía que me cortaran la trama para contarme algo de eso. Por suerte para mí, esos incisos son cortos, algunos de apenas una página, y como digo no dejan de ser interesantes, solo que yo prefería lo que ocurría en el presente. Soy demasiado impaciente.

En definitiva: Acercaos a la novela de Álamo porque vale la pena y vais a pasar un buen rato. Además se lee de una sentada o dos. Y tiene secuela en la calle.

Libros leídos 2012 (19): Y pese a todo

LIBROS LEÍDOS 2012

1) Los caminantes: Hades Nébula, de Carlos Sisi
2) Choque de reyes (Canción de hielo y fuego 2), de George R.R. Martin
3) El Gobernador, de Robert Kirkman y Jay Bonansinga
4) Eterna, de Guillermo del Toro y Chuck Hogan
5) Edén interrumpido, de Carlos Sisi
6) 22/11/63, de Stephen King
7) El hombre en el castillo, de Philip K. Dick
8) Noche de difuntos del 38, de Manuel Martin.
9) Area 81, de Stephen King
10) La Guerra de la Doble Muerte, de Alejandro Castroguer
11) Blockade Billy, de Stephen King
12) El manantial, de Alejandro Castroguer
13) Tormenta de espadas (Canción de hielo y fuego 3), de George R.R. Martin
14) La guerra interminable, de Joe Haldeman
15) Última parada: la casa de muñecas, de Miguel Aguerralde
16) Hamelín, de Angel Luis Sucasas
17) Festín de cuervos (Canción de hielo y fuego 4), de George R.R. Martin
18) Robopocalipsis, de Daniel H. Wilson
19) Y pese a todo, de Juan de Dios Garduño

Había leído por esos mundos de internet que «Y pese a todo» era una novela que emanaba King de los poros de cada página. Creía que era una forma de hablar, una exageración motivada del hecho de que la novela se ambientara en Bangor, esa pequeña ciudad de Maine en la que vive el conocido autor de terror americano.
Lo diré con claridad: Cuando lees esta novela tienes la sensación de que «Juan de Dios Garduño» no existe, es como Richard Bachman, otro pseudónimo de Stephen King.
Para lo bueno y para lo malo.
Como fan absoluto del escritor de La torre oscura, la novela de Garduño me ha encantado de principio a fin. Su estilo es claro, directo, sencillo y tan fácil de leer que pronto te absorbe con la historia de estos tres supervivientes que viven atrincherados en dos casas, uno frente al otro, odiándose mutuamente.
Me pregunto por qué demonios no me leí esta novela antes.
Lo que puebla esta historia no son zombies, aunque a veces se refiera a ellos con ese nombre. Los enemigos de nuestros tres protagonistas son unos monstruos peculiares de los que no voy a hablar para no chafar parte de la sorpresa. Pero ni siquiera esos monstruos son los protagonistas de la historia, apenas un motor que pone en marcha el engranaje de cara a ciertos cambios en los tres supervivientes, verdaderos protagonistas de esta historia que engancha y mantiene el tipo hasta la última página.
Una lectura de lo más agradable y recomendable. Seguiré la pista de Juan de Dios. Si es que ese es su verdadero nombre.

Fotos de la presentación de El cuarto jinete en Fnac Callao – Madrid

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Presentados de forma inmejorable por Juan Antonio Román, cofundador de ESMATER (Asociación de Escritores de Terror Madrileños), el sábado 8 de septiembre de 2012 se habló en la Fnac de Callao de dos novelas de la línea Z: El cuarto jinete, de un servidor, y El manantial de Alejandro Castroguer.

La velada fue interesante. En lugar de Alejandro contamos con la presencia de Abel, protagonista de la novela de Castroguer, recién salido del psiquiátrico, y charlamos un rato con los asistentes al eventosobre zombies, literatura y cine.

Cuando llegó el turno de preguntas, una de ellas recayó en mí: ¿Te gusta el chocolate? Me quedé en blanco, pensando «¿y esto a qué viene?» y me puse a contestar. Así que de repente me sacaron una tarta de tres chocolates y me cantaron el cumpleaños feliz. La verdad, fue un momento bonito y entrañable. Como ya he dicho en muchas ocasiones, lo mejor de haber publicado la novela es la gente a la que he conocido gracias a ella. Y este día se dieron cita en la Fnac muchas personas a las que ahora aprecio y cuento como amigos.

Gracias.

Libros leídos 2012 (12): El manantial

LIBROS LEÍDOS 2012

1) Los caminantes: Hades Nébula, de Carlos Sisi
2) Choque de reyes (Canción de hielo y fuego 2), de George R.R. Martin
3) El Gobernador, de Robert Kirkman y Jay Bonansinga
4) Eterna, de Guillermo del Toro y Chuck Hogan
5) Edén interrumpido, de Carlos Sisi

6) 22/11/63, de Stephen King 
7) El hombre en el castillo, de Philip K. Dick
8) Noche de difuntos del 38, de Manuel Martin.
9) Area 81, de Stephen King
10) La Guerra de la Doble Muerte, de Alejandro Castroguer
11) Blockade Billy, de Stephen King
12) El manantial, de Alejandro Castroguer

Es complicado reseñar esta novela sin hacer spoilers sobre su contenido, por lo que seré breve y comedido. Y para empezar, una opinión básica: Es una pena que por la dichosa etiqueta que se puede observar en la portada mucha gente se vaya a quedar sin leer una gran novela. Ojo, que la etiqueta no miente, que entre estas páginas se encuentran imágenes verdaderamente violentas y sexo tan explícito como el que podrías encontrar en cualquier película pornográfica. Alejandro Castroguer ha escrito este libro sin ningún tipo de tapujo, escupiendo sus palabras sobre el papel con absoluta impunidad, decidido a mostrar la crudeza de lo que hay detrás del ser humano, aquello que muchos callan y niegan pero que existe y es tan real como la vida misma: el sexo y la violencia.
En sí, la novela habla de dos supervivientes a una hecatombe zombie, Abel y Verona, que eran apenas unos niños cuando el desastre borró la humanidad de la faz de la tierra. Malviven encerrados en un instituto dando rienda suelta a sus juegos de sexo y sangre, obligados a permanecer en la prisión que supone el instituto debido a la horda de muertos vivientes que les rodean.
Personalmente, para mí la novela va de más a menos. No de una forma alarmante o que te haga renegar del libro, ojo, pero la primera mitad de la historia es tan brutal, tan cruda y tan directa que me atrapó sin concesiones. Permitid que me explique:
Quedé completamente a merced de la mente del autor (enferma, ese tipo tiene que ser un maldito enfermo y a mí no se me ha ocurrido otra cosa que crear una amistad con él. Eso me hace dudar sobre quién es el más enfermo de los dos…). Esos dos personajes tan maravillosamente dibujados que son Abel y Verona despertaron mi imaginación y mi mente, desde prácticamente el principio se despertó un odio profundo en mí hacia Abel, y me maravilló ese pequeño detalle, pero tan grande en realidad, de hacer que ninguno de ellos supiera describir objetos cotidianos para nosotros pero que ellos, al crecer en un mundo que no los tenía, no sabía darles uso ni palabra, ese desconocimiento de significados me resultó de lo más gratificante. Ir descubriendo, de la mano de semejantes hijos de puta lo que significaban sus juegos (el bautismo, la llamada telefónica, la evangelización), todo a ritmo del The end de The doors me resultó tan placentero como sublime.
Por contra, la segunda mitad de la novela me resultó menos interesante. Una vez expuestas las cartas sobre la mesa quedaba tan sólo guiarnos hacia la resolución, introduciendo tres piedras y lo que viene con ellas (lo describo así para que sólo sea entendido por aquellos que han leído la novela y sin decir nada en realidad), y aunque el pulso narrativo se mantiene y el interés por lo que suceda no decae (de hecho, amé toda la parte final de Abel), como es obvio deja de lado la imagenería, la construcción de ese universo que sólo entienden abel y Verona ha concluído y por tanto aquí deja paso a la trama, y mi emoción bajó del 10 absoluto al 9. Ya dije que no era alarmante. 
Y sólo es algo que yo opino, esa construcción de ese universo hizo que mi imaginación despertase y se emocionase y por tanto aprecié mucho más esa primera parte, simplemente.
Castroguer, eres un degenerado. Ahora bien, un degenerado que escribe de puta madre. Felicidades, te has sacado de la manga un novelón.

La llegada del cuarto jinete

23 de Marzo de 2012
Después de tantos esfuerzos, El cuarto jinete ve la luz, de la mano de Dolmen, mi primera novela publicada. No sé ni cómo expresar lo nervioso que estoy. Supongo que es normal, claro. En fin, que ya está. Espero que os guste mucho, que os entretenga y os haga pasar un buen rato. Que os guste tanto como me gustó a mi escribirla.
¿Qué ocurriría si tus familiares, vecinos y todos aquellos a los que conoces se convirtieran en insaciables e incansables asesinos? Ven, acompáñame, Castle Hill es un pequeño y apacible pueblo americano digno de postal, un lugar donde la vida es tranquila y fácil. Todos los pueblos tienen ovejas negras pero, por lo general, la paz domina la vida de este pequeño y agradable lugar.
Las cosas están a punto de torcerse del todo. El cuarto jinete, el más mortal de todos los virus concebidos por el hombre, el principio del fin, un virus capaz de someter a toda la raza humana, está a punto de ser liberado.
Enfrentados a un enemigo sin miedo, inagotable y atroz, los habitantes de Castle Hill tendrán que valerse por sí mismos para sobrevivir. La pesadilla está a punto de comenzar.
No hay ningún sitio al que huir si la muerte corre más que tu.