A medida que se acerca el nuevo año, más allá de la huelga de guionistas que nos dejará sin 24, Lost, Heroes y Prison Break, existe otra serie cuyo lanzamiento inminente ya se hace notar en internet. Se trata de Las crónicas de Sarah Connor, y cada vez pinta mejor.
Por cierto, que para ir calentando motores he revisitado las películas. Terminator ha envejecido regular. Los efectos huelen un poco y el doblaje de peli serie B ochentera la deja bastante mal. Lo salva un poco Constantino. Y hay cosas de dirección dignas de crucificar al colgado de Cameron. Pero sigue siendo una peli digna de ver. Sobre todo por lo que la sigue.
En cuanto a Terminator 2, pues nada, sigue siendo una peli genial, con un Schwarzenegger magnífico, una Linda Hamilton maravillosa, y una historia que probablemete sea lo mejor de todo el lío. Y los efectos especiales siguen siendo la leche. Es una de las mejores pelis de acción que hay, y aún mantiene el tipo. ¿En contra? Tal vez el lenguaje callejero-chuleta-noventero de John Connor, con frases tan pasadas como «date el piro» y «alguna que otra joya de ese calibre.
Y Terminator 3… bueno, si alguien esperó en algún momento que fuera capaz de superar a la dos, sin Cameron tras las cámaras y sustituyendo al ahora drogadicto Edward Furlong por el soseras de Nick Stahl… pues como que era un poco soñador. La peli se defiende, está bien, pero no puede competir contra T2. Aunque eso sí, la persecución de los camiones es para hacerle un par de reverencias al director, y e final es para levantarse y aplaudir al guionista. Gran giro final que, cuando uno lo piensa, no podía ser de otra manera.
A comernos las uñas hasta la llegada de Las crónicas.