Lockout

Ciencia ficción y acción… ok, yo ya voy predestinado a que me guste. Echo de menos la época en que estas pelis eran más corrientes (desde Rescate en Nueva Yotk a Fortaleza infernal e incluso El quinto elemento). Y la verdad es que no me ha defraudado para nada.
El personaje de Guy Pearce es cojonudo, con ese humor continuo que me ha hecho partirme de la risa y que sólo le hubiera quedado mejor a Bruce Willis; incluso la hija del presidente (Maggie Grace, que a este paso va a coger el relevo de Kim Bauer en eso de ser secuestrada, porque he visto ya tres pelis en que la secuestraban como revulsivo e inicio de la acción) es un personaje interesante. Y los dos villanos de la función son también un par de personajes potentes. ¿Se les podría haber exprimido más? Sí. ¿Parece que la película va demasiado rápido y molaría que durara más? Sí. ¿Tiene aroma a serie B de lujo? Sí, pero en realidad eso la hace más interesante.
A mí me ha encantado, la verdad. Me lo he pasado bien, me ha entretenido y me ha dejado con ganas de más. Son tres cosas básicas. No necesito que siempre sean película rodadas con arte y filigrana para disfrutar en el cine. A veces sólo quiero divertirme y aquí lo he hecho con creces.

Pelis mediocres

El fin de semana pasado vi dos pelis, y ambas resultaron ser tan olvidables que me dio pereza reseñarlas en el blog.
Una de ellas es Happy Thank you More Please, escrita, dirigida y protagonizada por ese hombre que, haga lo que haga, siempre será Ted Mosby. Y, que quereis que os diga… demasiado indie para mi gusto. No llegó a cuajarme en ningún momento, aunque podría haberlo hecho. La historia de Atterton era la que más potencial tenía. Y ella está brutal. El resto… olvidable.

Y también vi Red, una película a mayor gloria de Bruce Willis que tiene sus cosas interesantes (que aparezca Bruce Willis siempre es un punto) pero que a ratos se hace lenta y pesada. Eso sí, a pesar de Bruce Willis, lo mejor de la película es John Malkovich.