El lado oscuro de la luna


Cuando hace tiempo salió Transformers 1, y a pesar de que las películas de Michael Bay me divierten como a un crío, me negué a verla. Nunca me habían gustado los muñecos de Transformers, nunca había visto la serie de dibujos, y una película protagonizada por camiones robots me parecía una solemne bobada. Como en muchos casos, tuve que tragarme mis palabras.
Fue un amigo mío (Adri) el que me insistió para que la viera y cuando lo hice me encontré con una película puramente Michael Bay, de acción, aventuras, ritmo frenético y puntos de humor que hacían de la película algo bastante entretenido.
Esta tercera parte viene a ser más de lo mismo. Los robots siguen luchando por el bien del país, los efectos especiales están de puta madre y el humor sigue presente. En general es una buena película para pasar un buen rato. Con las tres películas me ha pasado lo mismo, que pienso que los humanos están ahí para crear empatía, pero su función es bastante absurda. Millones de disparos no hacen absolutamente nada contra los malos (cuyo nombre he sido incapaz de aprenderme). Son como hormigas luchando contra elefantes. Todo el rato corriendo de un lado a otro, supuestamente haciendo algo, pero lo más que hacen es parapetarse y disparar sin ton ni son y ser salvados una y otra vez por los camiones robots buenos. En general, bastante absurdo todo. Pero aún así, qué quereis que os diga, a mi me divierten.
Ah, maravilloso el guiño-puñalada a Megan Fox.