La decadencia está prohibida

Es lo que tiene. Haces un parón por Navidad y cuando llega el año nuevo, anuncias a bombo y platillo que «vuelve Herederos», ahí, poniendo toda la emoción al alcance del botón 1 de cualquier mando a distancia. Pero lo que emitía TVE no era un capítulo nuevo, sino un especial en plan refrito de lo que había ocurrido hasta entonces. Vamos, un «previously on Herederos» pero en plan tipical spanish, o sea, cutre. Y si a eso le sumamos la competencia, a saber, el esperado regreso de Los hombres de Paco (una de esas series que no comprendo por qué triunfan), el esperado regreso de Los Serrano (otra de esas series que no comprendo por qué triunfan), y el estreno de la cuarta temporada de House (una más de esas series, ésta encima con médico borde incluido). Y pasó lo que era de esperar. Entre tanto estreno y un especial que no cuenta nada nuevo, Herederos hizo un mísero 10’9, siete puntos menos que antes de Navidad. El verdadero reto es la próxima semana, cuando, esta vez sí, vamos con capítulo nuevo. Ahí sí, se verá cual es nuestro destino.
Como nota al pie de este post, añado que MIR (otra más de esas series que no comprendo, pero en este caso lo que no comprendo es cómo le dieron una segunda temporada tras los miserables resultados de audiencia de la primera temporada) ha sido retirada de la parrilla tras UN ÚNICO episodio que hizo, como no, un resultado miserable. En fin, así es este negocio… de duro.