¿Dónde coño está Finlandia?

No sé, me da un poco la impresión de que Finlandia es a Europa lo que Teruel a España (y que me perdone la gente de Teruel, que lo digo sin ánimo de ofender), que no existe, que nunca pasa nada allí… claro que con el frío que tiene que hacer como para salir de casa a hacer algo…
Sin embargo, ahora Finlandia es famosa en el mundo entero (es un decir) por haber ganado el codiciado festival de Eurovisión (eso era ironía), y haberlo hecho además con unos tipos vestidos de monstruos (pues vaya novedad, España lleva enviando verdaderos monstruos unos cuantos años, los nuestros son reales y no nos comemos un mojón… y vaya, lo he dicho como si me importara un pimiento el dichoso festival).
El caso es que la gente hablaba tanto de los finlandeses ganadores, unos tal Lordi, que si la canción era buena, que si cómo se puede permitir a unos engendros así siquiera participar, que era buen rock, que apestaban, que el espectáculo que montaban era muy bueno, que pertenecían a un culto satánico… joder, tanta diversidad de opiniones tan confrontadas me hizo querer juzgar por mi mismo.
Me fui a You Tube, busqué Lordi, y puse la canción ganadora del certamen: Hard rock hallelujah.
Y me gustó.
Así que busqué información en google y lei algunas referencias del disco The Arockalypse. Y la mayoría concordaban en que era un muy buen album. Así que me hice con él. Y, joder, suenan muy bien. De hecho, la primera canción, cuyo título podría traducirse como «Devolviéndole las pelotas al rock» es toda una declaración de intenciones y un buen pelotazo de rock and roll. Hombre, yo les quitaría un poco de esa ronquera con la que cantan los discos que quieren llegar a ser más hard que rock, pero por lo demás, buenas guitarras, buenas melodías, buenos ritmos y rollito gótico.
Así que he llegado a una conclusión. Finlandia puede que no salga nunca en las noticias y que haga tanto frío que no permita salir de casa, pero desde luego, el tiempo lo aprovechan bien los músicos. De allí son algunos de los mejores grupos de rock gótico de los últimos tiempos, con HIM (cuyo último disco apesta pero todos los demás son grandes discos) y Apocalyptica a la cabeza. Y con algo menos de nivel y tirando un poco más a la juventud pop-rock, The Rasmus ha demostrado con sus dos últimos discos que poseen fuerza, sobre todo en las guitarras.
El tiempo nos dirá si Lordi entra en el cuadro de honor. Desde luego yo no pondría en mi curriculum que uno de mis logros es haber ganado Eurovisión. Y no seré yo quien vaya a verles en directo, que el rollito ese de las máscaras no me acaba de molar y no me molaba tampoco cuando Slipknot lo puso de moda.
En fin, que os dejo aquí el video de una canción que por lo que sé debe ser de un disco anterior pero que me gusta por asemejarse a la estética de la trilogía diabólica de Sam Raimi. La canción se llama Blood Red Sandman:
Si os habéis quedado con ganas de más, aquí hay.

Yippy kie yah motherfucker

Confirmado. Habrá Jungla de cristal 4 (Die hard 4).

Vuelve John McLane, y aunque no se sabe nada de la trama, esperamos con ansia que llegue a las pantallas. Willis dijo en una entrevista que creen que el estreno se producirá en Navidad del 2007.

La película, que iba a empezar a rodarse hace casi un año, sufrió un cambio de guión de última hora que provocó este retraso debido al huracán Katrina. Y es que Die Hard 4 iba a empezar con una explosión en altamar que lanzaría olas gigantescas sobre Nueva Orleans. Y claro, no era plan…

Queremos oírle gritar aquello de Yippy Kie yah, motherfucker!!!

La primera película de la saga está basada en una novela de Roderick Thorp titulada Nada dura para siempre (Nothing lasts forever) que incluso McTiernan, director de la primera película, niega haberse leído. Pues bien, existen diferencias entre novela y film, pero por lo general se puede hablar de una buena adaptación.

Por ejemplo, el protagonista de la novela no se llama McLane sino Joe Leland, un poli de vacaciones que va a visitar a su hija (no a su mujer) a Los Angeles. Se encuentra en el cuarto de baño del edificio cuando los terroristas toman el control y hacen rehenes. Desde ese momento, la novela siempre sigue los pasos del protagonista, que consigue comunicarse con un agente de policía en el exterior a través de un walkie. Y como en la película, los terroristas son alemanes, con lo que nuestro protagonista no entiende muchas de sus conversaciones.

Es destacable el hecho de que algunas de las mejores secuencias de la película también se encuentran en el libro. Por ejemplo, cuando McLane cuelga del hueco del ascensor con la correa de su arma, o cuando lanza a un terrorista a través de una ventana para llamar la atención de la policía (aunque en la novela el cuerpo no cae sobre el coche), o cuando McLane mete a un terrorista muerto en el ascensor con un cartel que dice «Ahora nosotros tenemos una metralleta» solo que en la película cambiaron nosotros por Yo y le añadieron aquel jocoso ho ho ho; o la bomba atada a una silla que hace reventar las ventanas del edificio, o cuando McLane hace rapel por el exterior del edificio haciendo uso de una manguera de extinción de incendios, o, memorable escena, cuando se pega con cinta adhesiva un arma a la espalda antes del enfrentamiento final.

Mítica película aquella primera Jungla de cristal. Y la segunda le va a la zaga, de hecho hay quien dice que es mejor que la primera. La tercera está bien, aunque en algunos momentos sobra humor por parte de Samuel L Jackson. Esperemos que la cuarta mantenga un nivel aceptable de acción. Aunque no es difícil teniendo a semejante personaje protagonista…

Yippy kie yah…

You Tube

Este post va a requerir algo de tu tiempo. O también puedes sólo leerte el post.
Para los no iniciados en internet os describo a grandes rasgos lo que es You Tube. Se trata de un servidor que aloja cualquier tipo de videos que cualquiera puede colgar en internet para su pública difusión. Así, se pueden encontrar desde trailers de películas a videoclips, entrevistas, chorradas varias que graba la gente y documentales, como es espeluznante loose Change que hoy por hoy es el video más visto de internet. Hasta trozos de Humor amarillo se pueden ver.
Y de eso va esto hoy, de videos. Os voy a colocar aquí los enlaces a algunos videos que podéis ver si os apetece.
1- Girls go wild on webcam. Otro tipo de videos que se pueden encontrar en internet son aquellos grabados con webcam, que van desde chinos imitando a back street boys hasta chicas haciendo striptease. este video en concreto se inicia como cualquiera de estos últimos: una chica hablando con su novio empieza a hacerle un striptease. entonces es interrumpida por unas amigas, que, con la burla, atraen a más chicas a la habitación, hasta que todo empieza a llenarse de chicas que hablan y se rían para la cámara. solo que resulta que el video es falso y se trata de una campaña orquestada por la marca de desodorantes Axe.
2- Dani California. El último videoclip de Red Hot Chili Peppers. en él, se dedican a imitar a miles de estrellas de la música de todos los tiempos, desde Elvis hasta Greenday (que buena la chaqueta y la corbata), e incluso a Nirvana en el umplugged de la MTV. El video es curioso.
3- Nada por aquí. Otro videoclip. En este caso de Jaime Urrutia y con Enrique bunbury de colaborador. Aquí se puede ver (por fin) a Bunbury después de casi nueve meses desaparecido en tierras cubanas, gaditanas y zaragozanas. Parece que le ha sentado bien el descanso.
4- Unos anuncios hechos en Francia para prevenir el SIDA. El primero lo protagoniza una niña que deviene en mujer. El segundo busca un público homosexual. Ambos anuncios son muy buenos.
5- Ya que os hablé ayer de ella, os dejo aquí los dos trailers que pueden verse en internet sobre Snakes on a plane. El primero y el segundo.
6- Por último, os dejo un enlace para descargarse un video de una de las mujeres más hermosas de este planeta (Natalie Portman)… rapeando. Y no solo rapeando, sino diciendo verdaderas obscenidades como «suck my dick» y diciendo que le gustaría mandar a tomar por culo a todos los fans. Tranquilos, Natalie no se ha vuelto loca. Era una parodia realizada para el programa Saturday Night Live… pero está de puta madre. Descargarlo aquí.
Y eso es todo por hoy, espero que lo hayais disfrutado.

La Serie B contraataca


Serpientes en el avión.
Así se llama el último fenómeno del cine made in Hollywood, un largometraje que está trayendo cola en la mayoría de los foros sobre cine, y es que, desde hace unos meses la película ha creado tal expectación en internet que han surgido miles de páginas no oficiales, posters hechos por foreros y hasta merchandising sobre el film que nada tiene que ver con la compañía productora.
Hagamos un rewind y situémonos en 2001, cuando el guión estuvo listo y todo preparado para rodar la película, en la que, por cierto, nadie tenía demasiadas esperanzas de conseguir algo más que un estreno directo a DVD. Entonces, unos hijos de su XXXX madre decidieron lanzarse en avión sobre las Torres Gemelas, y la incomprensible mentalidad estadounidense convirtió el mundo en un circo, suprimiendo de inmediato escenas de películas que esperaban fecha de estreno y en las que se contemplaba el sky de New York (que grande era aquel poster de Spiderman…) y suprimiendo del séptimo arte todo lo que tuviera que ver con aviones. Una de las primeras afectadas fue aquella película de Schwarzenegger llamada Daño colateral, que sufrió los daños colaterales del atentado, viendo como se retrasaba su estreno indefinidamente y teniendo que regrabar el prólogo, donde la mujer e hijo de Schwarzeneger morían dentro de un avión durante un secuestro. Al final lo dejaron en bomba en la calle, que siempre es más aceptado…
Snakes on a plane, aún en preproducción, se vio cancelada y el guión terminó en un cajón hasta que el año pasado alguien decidió que sería divertido hacer una película sobre un avión rebosante de serpientes. Con semejante trama, nadie podía esperar nada más que una serie B, hasta que Samuel L. Jackson empezó a propagar a los cuatro vientos que le encantaría salir en la película. En ese momento, con uno de los grandes subido a bordo, la película pasó a ser una Serie B… pero con clase.
Y entonces empezó el furor. La idea gustó en los foros y la gente empezó a desbarrar sobre la posible trama de la película (de la que únicamente se sabe lo siguiente: Samuel L Jackson tiene que escoltar a un hombre que testificará en pocos días, pero aquellos que no desean que testifique deciden llenar el avión de serpientes muy venenosas para silenciarle) y sobre la idea de que, como toda buena serie B, las dosis de sangre, violencia y sexo estarían en las cotas más altas.
Hasta tal punto fueron altas las expectativas de la gente que ya se proclama a Serpientes en el avión como una película de culto. Y los directivos, que pretendían sacar la película como «no recomendada a menores de 13» han decidido que sus posibilidades son más altas si le dan a la gente lo que quiere. Así que, meses después de estar terminado el rodaje, el equipo y reparto volvió a juntarse y se grabaron nuevas escenas con más… eso, sangre, violencia y sexo. De hecho, se comenta que una de esas nuevas escenas muestra a una pareja follando en el cuarto de baño del avión hasta que aparece una de las serpientes. Las apuestas sobre donde muerde al chico van encaminadas en una única dirección.
Alex Faundez dice en su sección hollywood Boulevard de la revista Imagenes (número 258) que «no cabe duda de que Snakes on a plane será una de esas experiencias fascinantes que sólo pueden disfrutarse en una sala de cine: la película no habrá por donde cogerla (¡y qué mas da!) pero la reacción del público al ver serpientes paseándose libremente por el avión no tendrá precio.»
Me encanta ese «y qué mas da». Desde luego yo iré a verla, junto a toda esa masa de gente que disfrutamos de la serie B como el más puro entretenimiento, amén de lugar donde de vez en cuando uno se encuentra verdaderas joyas que superan, con mucho, a la Liga Superior. Que se lo digan a Tarantino.

El chico que observaba el infinito

Hoy me he quedado obnubilado, mirando al frente, hacia la blanca pared de mi habitación, donde no hay nada. Pero yo no veía una pared, en ese momento yo tenía superpoderes y veía a través de esa y de todas las paredes que había tras ella. Me encontré a mí mismo encarándome al infinito, al todo y lo que hay incluso más allá.
A Paul Auster le han dado el Premio Príncipe de Asturias de las letras. Nunca he leído nada suyo, por lo que no puedo permitirme el lujo de hablar sobre su capacidad literaria. Nunca me he cruzado en mi camino con un libro de Paul Auster, pero existe un libro que me gustaría mucho leerme y que no tengo (ya podéis apuntar para mi cumpleaños, pero no vayáis todos a regalarme lo mismo, ¿eh?)
Y ese libro no es otro que El país de las últimas cosas.
Un libro que narra, en primera persona, las vivencias de Anna Blume en busca de su hermano a través de una ciudad caótica, destructiva y enferma. Siguiendo el análisis de la novela hecho por Pavel Kraljevich, es un lugar donde la muerte ha vencido el pulso a la vida y la supervivencia se basa en el asesinato, el secuestro, la miseria y la sangre. Definido por el Whasington Post como «uno de los mejores intentos contemporaneos de definir el infierno», la ciudad que recorre Anna Blume a través de las páginas puede deducirse que es un Londres fantasmagórico y casi derruido donde los aviones se estrellan contra los edificios, los portales parecen bocas de lobo y la población se halla permanentemente al borde de una explosión. Termina Pavel diciendo que, después de haber leído la novela de Auster, ver los telediarios es algo que hace sentir escalofríos en la espalda.

La novela de Auster comienza diciendo: Estas son las últimas cosas que te escribo. Desaparecen una a una y no vuelven jamás.

Esas son, por otro lado, las palabras que repite una y otra vez, en forma de letanía, la mujer de Liberto Rabal al tiempo que estrecha la mano de su marido dentro de una nave espacial, mientras ambos miran el cuerpo tendido delante de ellos y aún vestido con el traje de astronauta del que sale un hilillo de sangre que vuela hacia arriba debido a la gravedad cero.
El cuerpo es el de Enrique Bunbury. La escena corresponde al videoclip de «Lady Blue». Las palabras de Auster se clavan en la memoria como ganchos. Canta Enrique:
Todo es insignificante / Nada es tan preocupante
Quizá debería haber dicho que nada es tan aterrador como la insignificancia de las cosas. Preocupante se queda corto, pero aterrador no pegaba con el resto.
Continúa Enrique:
No volverás a ver / la mirada triste del chico que observaba el infinito
Y así, hemos girado una vez más y vuelto al principio. Porque todo es Ka.
Y el Ka, amigos, es una rueda.

Freak

Me hago eco del manifiesto que he leído estos días en internet con motivo del día del orgullo friki celebrado el 25 de mayo:

Sé manejar un ordenador, tengo un blog y leo un puñado de ellos. Me gusta Star Wars, sé nombres de personajes y especies alienígenas, sistemas planetarios y lunas. He visto El señor de los anillos en su versión para el cine y en la extendida, he leído El Hobbit y a veces recito pasajes del universo Tolkien. Veo películas chinas en versión original y series de televisión aún no emitidas en España que ninguno de mis amigos conoce. Me gustan las camisetas negras, pero también me pongo las que llevan a Homer en el pecho. Considero que las tiras de Calvin&Hobbes son la repera. Leo libros de ciencia ficción y fantasía y he coqueteado con el anime japonés. Me acuerdo de la letra de las canciones de Dragones y Mazmorras y recuerdo Masters del universo como una de las mejores series de dibujos de mi infancia, y la versión en carne y hueso como un peliculón. He hecho tests para ver si era friki y no he suspendido. También he hecho tests para saber qué personaje del Mundodisco soy. He jugado al juego de tablero de Juego de tronos, he sido atacada por los Salvajes y he blasfemado «¡los otros te lleven!». También he gritado «¡Insensatos!» cual Gandalf a punto de caer a los fuegos de Moria. Y quien no haya imitado a Yoda alguna vez, que levante su espada láser.

Supongo que yo también soy un poco friki.

Esto es lo que somos


Recuerdo que cuando empecé a ver Millennium con mi madre (los jueves a las diez en canal plus) la serie llevaba ya varios capítulos en antena, por lo que nunca vi aquellos primeros capítulos de inicio. Sin embargo, la serie venía avalada por su creador, Chris Carter, el mismo de Expediente X, y estábamos en pleno apogeo de lo fantástico y sobrenatural.
Recuerdo que mi primera impresión sobre Millennium fue que era más sosa que Expediente X. Sin embargo, mi madre y yo seguimos viéndola, y poco a poco, a medida que fuimos hilando los datos de una subtrama enterrada al fondo de la serie y avanzada en cada capítulo de forma que sólo los más atentos se dieran cuenta… la paranoia nos invadió.
La serie comenzaba con una cabecera cuando menos inquietante, que coloco a continuación:

Y aquellas frases eran cuando menos mosqueantes: «esto es lo que somos», y sobre todo, «la hora está cerca», que parecían vaticinar un acontecimiento futuro, pero cercano, que sería el culmen a la serie.
Millenium estaba protagonizada por Lance Hennriksen, recordado secundario de Aliens, Encuentros en la tercera fase, Scream 3, Dead man y muchas otras películas. En la serie, interpretaba al agente Frank Black, un hombre con la capacidad de visualizar con su mente partes del pasado o del futuro de las escenas de crímenes violentos. Angustiado por esas imágenes y acosado por un hombre que le envía fotografías de la esposa e hija de Frank, se retira y aleja de su vida, mudándose a otro lugar… que no recuerdo cuál era…
El caso es que en dicho lugar contacta con él una facción del FBI llamada Grupo Millennium, cuyo jefe es ahora famoso por interpretar a John Locke en Lost, y le contratan como colaborador para resolver crímenes especialmente violentos. Por supuesto, en pro de la serie, Frank acaba aceptando. Y tras resolver su primer caso, al llegar a su nueva casa recibe un sobre por correo. Y al abrirlo, se encuentra con una foto de su mujer e hija.
A lo largo de la primera temporada recibe paquetes como ese en varios capítulos, lo cuál resultaba verdaderamente intrigante.
Y cada vez que Frank Black entraba en la web del Grupo aparecía el símbolo (la serpiente en círculo) y una frase: «quedan 650 días». A lo largo de los capítulos, cuando se veía la web de Millenium, los días que se marcaban eran menores. Estaba claro, para el avispado, que aquello era una cuenta atrás y que la hora se estaba aproximando.
¿Pero la hora de qué?
Al que siguiera con atención la serie se le desvelaba la trama profunda, que no era otra que el fin del mundo. Un fin del mundo donde Frank Black debería intervenir para colaborar en uno de los dos bandos: el bien o el mal. Y aunque la serie parecía la típica de policías persiguiendo al asesino de turno, por detrás se trataba de la majestuosa preparación de la eterna lucha entre el bien y el mal. Multitud de series diabólicos poblaban la serie y ejercían de profetas de lo que iba a suceder.
Y para aquel que hiciera cuentas con las fechas de los estrenos de capítulos en USA, los días que faltaban según la web de Millennium situaban «la hora» en el cambio de siglo. La noche del 31 de diciembre de 1999 al uno de enero de 2000.
Chris Carter se preparaba para mostrarnos una batalla a lo grande.
Pero jugaba en contra con un factor importante: la escasa audiencia de la serie y la presión de las cadenas para eliminarla de la parrilla.
En mi mente queda el final de la primera temporada, cuando el acosador de Frank secuestra finalmente a su mujer y la banda sonora cambia la melodía para incluir otros instrumentos, haciendo que los pelos de tu cuerpo se erizaran. La segunda temporada iniciaba con la búsqueda de la mujer de Frank por el propio Black ayudado del grupo Millenium.
En esa segunda temporada se iban desvelando más detalles sobre esa apocalíptica lucha final, al tiempo que Frank empezaba a desconfiar del grupo Millennium y de sus verdaderas intenciones. En un capítulo, nuestro protagonista se enfrentaba contra una supuesta encarnación del mismísimo Satanás, que al final lograba huír montado en un helicóptero. Aquí había uno de esos detallitos míos, porque si uno se fijaba en la identificación del helicóptero, pintada en la parte de abajo, ésta decía H-666. Un número ciertamente metafórico…
A medida que se acercaba el final, y la hora, Frank descubría que el Grupo Millenium pretendía soltar un virus que provocaría que el fin del mundo fuera más cercano, para con ello, favorecer a las fuerzas del mal. Eso hacía que Frank tomara cartas contra ellos, enfrentándose al Grupo, al tiempo que intentaba huír del foco de acción del virus junto con su hija y su mujer.
Esa segunda temporada se saldaba con uno de los mejores finale season que he visto jamás (solo superado por los de 24… y no por todos), con la muerte de un personaje y la… situación en quedaba Frank Black. Además, ese capítulo cambiaba su cabecera. Misma música, algunas imágenes diferentes… y las palabras «The time is now». O sea, la hora ha llegado.
Carter tuvo suerte y pudo hacer una tercera temporada, que canal plus jamás emitió en españa, con lo que la gente que quería saber qué pasaba después del intrigante final season 2 nos quedamos con las ganas… hasta la llegada masiva del peer to peer en internet, demos gracias a la web.
En la tercera temporada Frank Black lucha por desenmascarar al grupo Millenium, pero lo tiene todo en contra y la ayuda que obtiene siempre es poca.
Y así, la hora llega. Y el desenlace. Intrigante desenlace.

Esto es lo que somos.

Creando mundos


Que cada libro es un mundo es una frase que me enseñó mi madre cuando era pequeño. Y me lo demostró regalándome un libro de fantasía cuyo título no recuerdo por haberse perdido entre los recovecos de mi memoria infantil, pero que supuso el primer paso en el largo camino de libros que he ido dejando atrás, devorádolos con la avidez de quien se ha convertido en un Lector Constante, encantado por poder visitar tantos mundos y tantas vidas, por enamorarme de las protagonistas, por enfrentarme valerosamente a los peligros, por descubrir intrincadas tramas políticas, por convertirme en héroe o en villano…
Esa fascinación me llevó a escribir mi primera historia a los siete años. Y bueno, digamos que mi capacidad narrativa no estaba muy desarrollada. Al menos puedo decir que ha ido mejorando con el tiempo, como el vino, así como también ha ido creciendo mi amor por esos mundos creados y ficticios (ya sabéis, como dice ese grupo de música, «la ficción es y será mi única realidad»), que cuanto más desarrollados más me gustan.
Y ahí es donde entra también, un poco, mi aficción ya comentada en este foro, por los detalles.
Huelga decir que uno de los primeros mundos que inundó mi cabeza fue el ingeniado por Jorgito Lucas en Star Wars. Yo fui uno de tantos niños que creció deseando una espada láser y estudiar en una escuela jedi. Luck fue uno de mis primeros ídolos.
Años más tarde entré con fuerza en otro mundo que también marcó parte de mi vida. El de Terminator. Y es que aderecé las dos películas con las sagas de comics que salieron relacionadas y que venían a ampliar la historia contada por Cameron, y darle áyor profundidad global. De esos comics siempre he guardado en mi memoria la persecución en que un terminator persigue a los protagonistas, que conducen un cadillac rosa, y los va eliminando uno por uno…
El tercer mundo importante de mi vida fue el que descubrí en los libros de Stephen King, y que hicieron nacer mi pasión por los detalles. Porque aunque los libros de Stephen King narren historias desconectadas entre sí, en muchos de ellos se encuentran guiños, menciones a personajes que salen en otras novelas, cosas sucedidas y narradas en otra historia, lugares, cruces, etc… cuya simple lectura puede parecer meramente anecdótica, pero que a mi parecer tienen un papel mucho más amplio, y es el de hacerte ver que todo lo que lees ocurre, en otro lugar donde puede ser posible que ocurran todas esas cosas, donde puedan existir toda esa gente que se cruzan y hablan entre ellos. Porque al reconocer un nombre, la sensación que te da es la de «hombre, este es el protagonista de tal novela», pero lo que sientes es «ah, este es el tipo que ya conozco de cuando visite aquella ciudad». Y de un modo personal, toda esa gente empieza a convertirse en viejos conocidos tuyos, y las ciudades que habitan pasan a ser lugares en los que tu has estado, y que has visto, con el ojo de la mente en el caso de las novelas de King, con el ojo real en el caso de las películas de Lucas.
King también me descubrió otro de los mundos que mas me han fascinado desde que lo empecé, y que es La Torre Oscura. Pero de ese sí no hablaré aquí. Ya le dedicaré un post. Y lo haré pronto.
Y alcanzando los últimos mundos que se han creado a mi alrededor… llego hasta 24 y Lost.

– El mundo de 24 se desarrolla gracias a la permanencia de los actores a través de las diferentes temporadas y la mención a cosas que ocurren en temporadas anteriores. La historia del mundo donde vive Jack Bauer empieza para nosotros el día de las elecciones primarias en EEUU donde se encuentra el primer candidato negro a la presidencia, David Palmer. Solo que en realidad, gracias a los diálogos, nuestro conocimiento sobre ese mundo se remonta a la guerra de Kosovo, cuando Bauer participó en una operación dirigida por Palmer para terminar con el cabecilla de los Drazen. El hecho de que temporada a temporada la vida de Bauer vaya cambiando y asistamos al desarrollo de la presidencia de Palmer, las intrigas interiores de la CTU (llamada UAT en España), y las vidas de Almeida, Myers, Dessler, O’ Brian, Logan, Buchanan, Chapelle… gente a la que conocemos, vemos desarrollarse, y en ocasiones vemos morir… y que han creado un universo entero, que se hace mayor cuantos más guiños se hacen, entre sí, y fuera del propio producto 24 (vease la película «El Castigador», donde el protagonista dice trabajar para la CTU; posteriormente esa anecdota se vería reflejada en la cuarta temporada de 24, donde se menciona al agente que aparece en El castigador).

– El mundo de Lost es quizá más complejo, no sólo por los continuos flashbacks que se hacen en la serie (y que a veces no resultan muy acertados pero que contribuyen a aumentar tu visión del universo Lost), también por los continuos guiños que entrelazan su propia trama (los detallitos, y cito sólo algunos ejemplos: ver a Hugo en una televisión en la que entra Jin en Japón; los famosos números; ver a Sayid en otra televisión en EEUU en la oficina del padre de Kate; que el propio padre de Kate sea luego quien libere a Sayid en la guerra de Irak; la asombrosa conexión entre Locke y Sawyer… etc, etc, etc…
El mundo de Lost se ha visto incrementado por el efecto paranoia y conspiración que se ha dado en todos sus fans alrededor del mundo y que ha dado lugar a numerosas teorías y explicaciones falsas, muchas de ellas difundidas por los propios creadores de la serie como despiste, y que ha visto alcanzado su esplendor gracias a la posibilidad multimedia, como el juego de la teoría lanzado por la cadena de televisión que emite Lost en EEUU, el supuesto libro donde estarán escondidas algunas de las claves de la serie y que saldría a la venta en breve, o las páginas que los creadores de la serie han sacado y están relacionadas con compañías nombradas en la serie, a saber:
Oceanic Airlines: la inexistente compañía aérea que se estrella en la isla, condenando en ella a todos los personajes. En la web se le puede dar uso a la famosa secuencia numérica, consiguiendo… inquietantes resultados… así como puede descuibrirse, entre líneas, un mensaje oculto de un supuesto naúfrago. Además del lema de la compañía: «llevándote a zonas que nunca imaginaste»… irónico.
The Dharma initiative.
The Hanso Foundation. Todo un placer para cualquier fan…
Al crear webs para todas esas compañías, lo que han logrado los creadores de Lost es engrandecer el universo en torno a la serie, además de darle un punto de realidad a lo que es tan sólo una serie de ficción. Y por supuesto, aumentar la teoría de la conspiración. Pero es que eso no es todo, pues pueden encontrarse referencias a Lost, y a The Hanso Foundation, en la película Mission impossible III, dirigida por uno de los creadores de Lost; así como también hay referncias en la otra serie creada por él, que es Alias.

La creación de mundos conlleva un duro esfuerzo. Lo sé, porque escribo, y porque a mi manera creo mundos que, aunque menores en tamaño y alcance, también engloban todo un universo paralelo. Hopewell es parte irrefutable de que esos mundos que yo he creado han calado en mí tanto o más que aquellos creados por otros.
¿Y saben qué es lo que les digo?
Que crear mundos es apasionante.

El típico chino de las películas

Seguro que le habéis reconocido, porque sí, es él, el mítico y típico chino que sale en un montón de pelis de acción solo para morir unos segundos después. (para seguir leyendo, ya sabes… pulsa en seguir leyendo)

Lo de este chino es increible. Por lo visto, no es un actor cualquiera, sino que también es director de especialistas de acción, ha participado en un buen montón de películas y series de televisión y tiene hasta club de fans.
Su nombre es Al Leong, aunque también ha salido en créditos como Albert Leong. Ha salido en películas como Jungla de cristal, Godzilla, Escape de Los Ángeles y El rey escorpión. También se le ha visto en series como 24, El equipo A, McGyver… Vamos, que el tio no ha estado quieto. En su filmografía como actor aparecen más de cincuenta nombres, y como especialista otros 27. ¡Y hasta ha dirigido una película! (que debe haber visto él, porque lo que soy yo…)
Él ha sido protagonista de comentarios del tipo «ey, ¿ese no es el chino de Jungla de cristal?» o «¿ese tío no ha muerto hace dos minutos?».
Desde aquí quiero rendir homenaje a este chino calvo, que el tío se lo merece. El próximo fin de semana brindaré por ti, Al Leong.

Detallismo

Los que me conocéis sabéis que me encanta buscar los detalles y las conexiones existentes en películas y series de televisión. Eso es probablemente lo que más me gusta de Lost, de la cual ya hablaré más adelante, por la forma en que te hacen los cruces de personajes, los guiños, y los fotogramas donde te muestran algo pero sin dejartelo claro, para que luego tengas que buscarlo como un idiota…
(sigue)

Bueno, pues en 24 también hacen ese tipo de cosas. Esta foto es del último capítulo de la quinta temporada. Si la miráis veréis una serie de números, que, unidos, forman un número de teléfono. Es un número que ya podía verse en la cuarta temporada y que los productores habilitaron para que, cuando el fan loco llamase, se encontrara bien con un contestador, bien con Tony Alemyda, Michele Dressler o Chloe O’Brian. Y ahí, el fan loco podía dejar sus sugerencias, etc.
Pero eso no es todo. En la foto aparecen también unas letras… al revés.