¿La vida personal de un actor afecta a nuestra percepción sobre su trabajo?

Es una pregunta que me hago de forma constante. Es algo común el hecho de que cuando un actor o actriz americano se ve envuelto en algún tipo de escándalo, de repente su lista de proyectos se resiente. El caso más reciente, Arnold Schwarzenegger y su divorcio que ha hecho que tres de los proyectos en los que se nombraba al actor tiemblen y al menos otros dos se vayan al garete.

¿Tanto nos influencia? Es cierto que todos, sin excepción, alguna vez hemos dicho eso de «paso de ver esta peli que fulanito no me cae bien». Que coño, de los que por aquí nos pasamos a menudo todos nos echábamos las manos a la cabeza cuando supimos que Bardem era el elegido para interpretar a Roland Deschains, hasta el punto de que, porque nos puede más el fikismo por La Torre, que si no, ni veríamos la serie.

Pero claro, es un caso flagrante de percepción pura y dura. Quiero decir… Bardem no es ni mejor ni peor actor porque nos parezca un gilipollas o nos caiga de puta madre. Ni siquiera le conocemos, pero lo que sabemos de él a través de los medios, o simplemente lo que su cara nos transmite, hace que nos produzca rechazo o aceptación.

A mi, por ejemplo, siempre me ha caído en gracia Kiefer Sutherland, desde pequeño que le vi en Cuenta conmigo o en Jóvenes ocultos (peliculón, por cierto). Es más, empecé a ver 24 sólo y exlusivamente porque aparecía él, y eso que llevaba unos años haciendo truñacos de los grandes. Y gracias a eso descubrí una gran serie, pero eso es otra historia.

Por la misma razón, nunca he visto ni ganas que tengo por mucho que digan que es genial, Dos hombres y medio. No soporto a Chalie Sheen.

Me cae genial Steve Buscemi y me hizo darle una oportunidad a Boardwalk Empire.

Me cae mal Penélope Cruz y me da tanta rabia que salga en Piratas del Caribe que, a pesar de lo bien que me cae Johny Deep, no fui a verla al cine. Influyeron otros factores también, pero no vienen al caso.

¿Hasta qué punto nos influye? Se ve que los americanos piensan que mucho. Porque son un montón los actores que se han visto envueltos en algún lío y no han sabido remontar sus carreras. Aunque también los hay que sí, y si no que se lo digan a Robert Downey Jr.

Y eso que hasta ahora hemos hablado de la simple apreciación del «me cae bien o mal». Pero recuerdo cierto actor secundario de los ochenta envuelto en un caso de pederastia que aún hoy sigue haciendo películas. Claro que es secundario. ¿Pasaría algo si de repente descubrieran que un frontman tipo Cristian Bale hace lo mismo?

Desde luego, Mel Gibson hacía cosas antes, pero desde que le acusan de zurrar a su mujer está más que desaparecido.

Claro que, en el lado opuesto, Roman Polanski, a pesar de sus líos con la justicia y esa supuesta agresión sexual a una menor, sigue haciendo sus películas y sigue siendo considerado uno de los mejores directores del mundo… claro que, por otro lado, tampoco es que llene salas en plan blockbuster.

¿Qué opinais vosotros? ¿Qué actores os caen mal y os jode ver en una película? ¿O cuales os caen tan bien que os mueven a ver algo sólo por su presencia?

Lo voy a decir sólo una vez

Prefiero no hacer mucho caso a los rumores que empezarán a salir desde ya sobre ese mega-proyecto de adaptación que tendrá La Torre Oscura, aunque mentiría si dijera que no estoy emocionado, porque La Torre Oscura es de lo mejor que me he leído en la vida, y sin duda, la saga que más me ha enganchado jamás.
Eso sí… Javier Bardem como protagonista y no veo la adaptación. Lo juro. ¿Bardem el mítico Roland Deschains? Venga ya, hombre. ¿Dónde hay que anotarse para suicidarse?
Menos mal que de momento esto es el típico baile de nombres, pero espero que ni se lo planteen, sinceramente.