Pluton BRB Nero

Nunca he sido muy amigo de Alex de La Iglesia. Bueno, quizás al principio. Acción mutante me pareció curiosa, y con El día de la bestia me reí bastante y me lo pasé muy bien. Después, para mi, empezó a decaer. La Comunidad me pareció una copia mala de Delicatessen, y 800 balas un coñazo. Creo que entendí lo que intentaba con esa película, pero no me gustó como lo hizo. De su andadura americana ni hablo, porque Perdita Durango la olvidé en cuanto salí del cine. Tras todo eso, me costó mucho trabajo ponerme a ver Crimen Ferpecto, pero al final acabé alquilándola y viéndola en una noche de esas de cine y palomitas. Y oye, me encantó.
Hoy han estrenado su serie para TVE2, titulada, con mucho cachondeo, Plutón BRB Nero, y la he visto, y he comprobado por mi mismo que los rumores son ciertos y está llamada a convertirse en una serie de culto. Una pena el horario, porque la serie es muy graciosa, además de, gracias a dios, diferente a lo que se hace en este país. Es ciencia ficción a lo Alex de la Iglesia. Mucho cachondeo, un guión ágil y con puntos, efectos especiales resultones (sí, efectos en una serie española!!!) y unos actores que se nota que lo pasan bien porque destilan buen humor.
Así que, tras este primer capítulo, puedo decir que Plutón BRB Nero pinta para ser una de las series del año. Si siguen por este camino, seguro.

Fin de semana aprovechado

Sin mencionar el hecho de que se ha filtrado en internet el disco de Bunbury, Hellville de Luxe, que en teoría se estrena el 7 de octubre. Evidentemente, EMI ha contraatacado intentando cerrar todos los sitios que ofrecían el disco. He sido más rápido que ellos, señores. Pero no se preocupen, sus ventas no bajaran por mi. Ya tengo reservado el disco, en edición CD y en edición vinilo. Los voy a comprar aunque me sepa de memoria las canciones. No se estresen.
En fin, a lo que iba. Este fin de semana, aparte de porque ya tengo el disco, ha sido un fin de semana de buenas sorpresas. Para empezar, el sabado vi en el cine una película de la que me esperaba poca cosa: Los extraños. cine de terror. Salí del cine habiendo pasado un buen rato de tensión, con un par de buenos sustos y gritos del personal (yo no, eh?) y con la sensación de que aún es posible hacer buenas películas con dos actores, un decorado y tres tios con máscaras. Traducido: con poca cosa.
Y el domingo, antes de ver el segundo «episodio» de Peking express, me fui al teatro a ver la nueva obra de la Fura des Baus, Boris Godunov, donde recrean el asalto por parte de tropas chechenas a aquel teatro ruso, en 2005, los tres días de asedio y la posterior entrada policial que llevo a la muerte a más de 150 personas. Cojonuda la obra. Por lo que te hace pensar (si os apetece la desgrano en otro post) y por el ratito de tensión que te hacen pasar cuando los terroristas empiezan a correr por los pasillos del teatro, encapuchados, armados con Kalashnikovs, gritando… y disparando.
Un aplauso.
Os dejo. Tengo un disco que escuchar y aprenderme de memoria.

Realities

En mi vida sólo me he enganchado a dos realities. Ni Gran Hermano (sí, vi la primera edición como todo hijo de vecino, pero más por culpa de Crónicas Marcianas que por otra cosa, porque salvo la gala final no vi ninguna otra) ni Supervivientes (cuya idea base me gusta pero nunca ha conseguido pillarme) ni el Bus (¿alguien se acuerda de esa mierda?) ni Operación Triunfo (aquí ni la primera edición ni nada) ni PopStars (sólo vi un programa y porque estaba tumbado en una cama de hospital, no podía moverme y la tele estaba enchufada en Antena 3) ni Hotel Glam (escalofríos me dan…).
Sólo dos realities. El primero, en mi vida estudiantil, fue Confianza ciega, donde tres parejas se separaban y ellos convivían con diez pivones que intentarían que engañasen a sus parejas, y ellos con diez machorros que lo mismo. Empecé a verlo de coña, porque semejante programa era realmente divertido de ver con Javi Ferrero (los que le conoceis ya os podéis imaginar) y acabé enganchado. Aún me acuerdo de ese programa con una sonrisa.
El segundo ha comenzado el domingo pasado, en Cuatro, y presentado por Paula Vazquez. Se llama Peking Xpress y consiste en soltar a diez parejas, darles un euro por día, y decirles que deben llegar desde Moscú hasta Peking. Y hala, a hacer autostop, pedir a la gente que les dejen dormir en sus casas, etc… El primer programa me gustó mucho. Tanto, que el próximo domingo volveré a verlo. Está contado en forma de documental, con un montaje frenético, y donde lo que menos me importan son las pruebas que les hacen de vez en cuando. Lo que mola es verles sufrir viéndoles intentar que les recoja alguien en la carretera. Se vieron cosas curiosas el otro día. Una madre y su hijo que tuvieron que dormir en medio del bosque porque no encontraron casa, las hermanas gemelas que encuentran donde dormir y a las dos de la mañana son despertadas por una mujer furibunda que las echa de casa… el hijo antes mencionado llegando a robar comida… en fin, que el programa está bastante entretenido.
Y me hizo pensar en una cosa… Los rusos son muy amables. Mira que son pobres, en comparación, y sin embargo la gente abría sus casas a los concursantes para que no durmieran en la calle, les daban de comer, les llevaban en coche. Anda, que si aquí se aparecieran dos rusos preguntando si les dejas dormir en casa que están en un concurso y no tienen donde dormir…

¿Para cuando un reality sobre «The running man», la novela de Stephen King?

Series

Estas son noticias de esas que Adri disfrutará. La cuarta temporada de Prison Break ya ha comenzado. Espero que Adri las esté viendo desde allí donde esté. De momento, pinta bastante bien, rompiendo el concepto de la serie, una vez más, para que en lugar de escapar, ahora haya que entrar. Buen comienzo.
En el horizonte cercano está el estreno de la tercera de Dexter.
Pero lo mejor de todo es que por fin está cerca la nueva temporada de 24, que a estas alturas ya sabemos todos vendrá precedida de una precuela de dos horas que se emite el 23 de noviembre. El trailer lo puedes ver aqui. 24:exile se llama la precuela y tiene una pinta cojonuda.
Y la séptima… para enero. Con ganas.

Herederos, second season

Pues hala, que este martes se estrena la segunda temporada de Herederos, de la cual, a pesar de trabajar en ella, no he visto más de dos capítulos enteros. No seais mal pensados, es lo que tiene currar en esto, que al final, por lo que sea, me tocaba trabajar el día de emisión hasta tarde y cuando llegaba ya estaba acabando. Y sí, también tiene que ver el hecho de que, trabajando ahí todo el día, al llegar a casa prefiero no encender la tele para nada.
En fin, que la temporada pasada acabamos con un nivel de audiencia de esos en los que las cadenas retiran las series. Un doce. Con un doce este año ya se han cargado la otra serie de Cuarzo (Fuera de lugar) y Plan América (ese intento equivocado de hacer Lost) que duraron apenas un par de capítulos cada una. Fuera de lugar la están reponiendo ahora, no sé para qué, porque hay grabados sólo unos cu8antos capítulos y como alguien se ponga a verlos se va a quedar sin final. Ya ves tu.
Pues nada, que a partir del martes vuelve ese gusanillo, el que depende de la audiencia que te vayas a la calle a buscar nuevo curro o puedas seguir con lo que haces. Ya veremos.